¿Fue una fachada? ¿Sólo mostraste la imagen de un producto? Estoy en ese punto en el que cuestiono todo lo que dijiste, en el que dudo de tus sentimientos y las incógnitas me acechan para ver si aún titubean tus palabras. No creo que haya sido todo un engaño, pero ahora navego en mares de tristeza, con oleadas de recuerdos y compuertas que se abren para dar libre paso al cause de mi ojos.
En cierta manera siento una gran decepción, tus acciones hablaron mas que tus promesas y los resultados avasallaron mi corazón. Quizás, si hubiese existido la sinceridad en ti, yo no estaría viendo como tu máscara se cae, ni estaría aqui dudando si alguna vez te quise; simplemente pudimos ahorrarnos las lágrimas y las quejas, la despedida hubiese sido distinta y este libro terminaría con otra tinta.
Cada segundo que transcurre con lentitud, cada minuto que se escabulle con morosidad, me lleva a rememorar como se desvaneció el encanto que me producías, como desapareció aquel fuego y pasión de mi amor, y como ahora solo cohabito con la decepción.
Quiero agregar que, las mentiras no son duraderas y las fachadas tienen que caer en algun momento, lástima que cuando sucedió, arrasó con todo a su paso, con sueños y anhelos que quedarán sepultados, con besos y proyectos que serán olvidados y con un sin fin de recuerdos que irán al pasado.
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